“Si
fallas bajo presión, tu fuerza es escasa” (Proverbios 24:10 NTV)
Dice una frase: “Los cristianos son como los saquitos de té, sólo sirven cuando se los
pasa por agua caliente”. Las pruebas no sólo nos capacitan, perfeccionan,
sino por sobre todas las cosas, ponen evidencia nuestro estado espiritual. La
persona que realmente crece y se desarrolla es aquella que aún en medio de las
situaciones adversas sigue avanzando. No es fácil continuar cuando hay escasez,
crítica, falta de resultados, etc. pero tampoco es imposible. Sí, se hace más difícil
el camino cuando no hemos sido precavidos y descuidamos nuestra vida interior. Por
tal motivo debemos estar preparados en todo momento y no esperar a que la
presión llegué para fortalecernos. Te animo a que en este nuevo año marques una
diferencia aprendiendo aún de las crisis, para que tu desarrollo sea constante y
puedas alcanzar grandes cosas de la mano del Señor.
Gabriel Fischer
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